Se llama Peanut (cacahuete) y es una tortuga. Cuando era pequeña su cuerpo quedó atrapado en un plástico de los que se usan para unir latas de bebidas. Peanut se fue haciendo mayor y el plástico ejerció de corsé impidiéndole su normal crecimiento.
Cuando tenía nueve años alguien la encontró y la llevó al Zoo de San Luis, una ciudad portuaria construida a lo largo de la orilla oeste del río Misisipi. Era 1993.
Los veterinarios la bautizaron con este nombre porqué observaron la similitud del animal con un cacahuete. A los 30 años Peanut seguía viviendo en un acuario, lejos de las amenazas que encontraría en su hábitat natural.
El caso de la tortuga Peanut es dramático pero por desgracia muy habitual. Los plásticos que unen las latas se siguen utilizando y, a menudo, acaban en el mar. Numerosos animales se ven afectados al enredarse con ellos.
Para solucionar este gran problema medioambiental empieza a utilizarse cartón para fabricar anillas para latas. La empresa Damm acaba de sacar a la luz una campaña publicitaria en la que explica que va a cambiar el plástico por el cartón 100% biodegradable.
Es un primer paso que deben seguir todas las empresas productoras de latas de bebidas.
En FX Sanmartí lo tenemos claro. Estamos por el medioambiente y por ello fabricamos anillas de cartón.