El cartón ondulado emite menos CO2 que las cajas de plástico reutilizable

Según los últimos estudios las cajas de cartón ondulado generan un 69,22% menos de emisiones de CO2 equivalente que las cajas plegables de plástico reutilizable en la exportación de frutas y hortalizas.

La inquietud por la legislación basada en las 3R – Reducir, Reciclar, Reutilizar– ha llevado al Instituto para la Producción Sostenible (IPS) a identificar una de las principales actividades que utiliza materiales reciclables y reutilizables, la exportación de Frutas y Hortalizas. Este motor económico utiliza las dos opciones de envase, cartón ondulado de un solo uso y plástico reutilizable, y precisamente es España uno de los mercados más importantes para ambas opciones al ejercer el liderazgo como primer exportador hortofrutícola de Europa.

Un gesto simple que conlleva un beneficio gigantesco. Si los productores hortofructícolas españoles decidiesen sustituir las cajas plegables de plástico por las de cartón ondulado para el transporte de sus productos, la rebaja de las emisiones de C02 sería equivalente a la que generan 400.000 vehículos. Esta es una de las conclusiones a las que ha llegado un estudio elaborado por la Universidad Politécnica de Valencia por encargo del Instituto de Producción Sostenible (IPS).

Bandejas de cartón automontables
Bandejas de cartón automontables

Con el objetivo de combatir el cambio climático, el Instituto para la Producción Sostenible (IPS), entidad sin ánimo de lucro que promueve una cultura empresarial de la sostenibilidad, ha encargado a la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) el “Estudio de Huella de Carbono de envases empleados para el transporte internacional refrigerado por carretera de productos hortofrutícolas”, que supone un trabajo comparativo de la Huella de Carbono de los dos envases más utilizados en la exportación de frutas y hortalizas: las cajas de cartón ondulado de un solo uso y las cajas de plástico reutilizables.

La Huella de Carbono

Salvador Capuz, responsable del estudio, ha señalado que para los diferentes escenarios se ha determinado la Huella de Carbono, cantidad total de emisiones de CO2 y otros gases de efecto invernadero (GEI) que se generan durante todo el ciclo de vida de las cajas, desde la obtención de materias primas, fabricación, transporte, uso, mantenimiento, hasta el tratamiento de residuos, etc.

Capuz desveló que las cajas de cartón ondulado generan hasta un 69,22% menos de emisiones de CO2 equivalente que las cajas de plástico reutilizable en el transporte de tomate a Alemania utilizando cajas de cartón ondulado y comparando con cajas de plástico con vida promedio de 20 usos. Desde el punto de vista del efecto sobre la categoría de cambio climático del planeta, ésta es una de las conclusiones que sitúan a las cajas de cartón ondulado en una posición de ventaja frente a las cajas de plástico reutilizables.

Economía circular sostenible

El IPS se interesa por la Huella de Carbono equivalente para medir el impacto negativo sobre el entorno y por los envases como elemento clave en la transición hacia una economía circular, baja en carbono, más eficiente en el uso de los recursos, más competitiva y menos contaminante.

El estudio refuerza la superioridad ambiental de las cajas de cartón ondulado en la lucha contra el cambio climático.

El transporte en cajas de plástico reutilizable supone añadir la contaminación de más de 400.000 vehículos. Un dato que no nos podemos permitir si España quiere alcanzar el objetivo europeo de reducir al menos un 40% las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030”.

Modelo de negocio sostenible

El divulgador científico Manuel Toharia considera importante promover modelos de negocio sostenibles para todos los eslabones de la cadena en la exportación de productos hortofrutícolas. “La libre elección de envases permitiría a los productores optar por la opción más respetuosa con el medio ambiente a la vez que la más rentable y segura. La solución al problema del cambio climático la encontramos en la priorización de materiales renovables”, señaló Toharia.

Para ello, recordó que la legislación española fomenta la utilización de envases y embalajes sostenibles, y los define, según la Ley de Residuos de 2011, como los fabricados con materia primas renovables, reciclables y biodegradables poniendo como ejemplo a los de papel, cartón ondulado, cartón compacto o madera. “Es necesario por tanto que se cumpla la ley”, concluyó Toharia.